martes, 17 de marzo de 2009

Puente

Lo malo de este puente que acaba de pasar, es que no tenía nada que ver con puente de Gustavo Cerati. Es algo lamentable. Mi puente fue terrible, el más feo que yo recuerde. Al contrario de mucha gente que seguramente se fue al mar u otra que se fue al concierto de Radiohead, yo me la pasé contemplando las paredes de mi cuarto preguntándome si existe algún remedio efectivo contra la calvicie que aún no tengo. El puente, que debí tomar para ir a visitar a mis padres o escribir aunque sea algunas páginas de la tesis que pretendo, sólo me dejó los bolsillos deprimidos y el episteme desordenado (como a cierta compañera). Intenté leer un acercamiento spicoanalítico a la obra de Fernando del Paso, el cual terminé alejando lo más lejos posible de mí. Nunca he entendido ese tipo de estudios, quizá porque no los merezco. Fue un fracaso.
El lunes, harto de darles tantas vueltas a mis asuntos (que si mi bola en la espalda, que si debería hacer ejercicio, que si debería lavar la ropa o limpiar el cuarto, que si algún día volverían mis inquilinos a casa, etcéteras), decidí salir a reconocer el mundo, a nombrar cada cosas por su nombre: la plaza, la iglesia, la familia, el elotero, la basura, la cantina, el camión. Ya saben, cosas de gente ociosa. Hice un par de llamadas para invitar un café al primero que me contestara, mandé mensajes de texto ( y también de humo) indescifrables que intentaban decir te extraño, o te quiero o he soñado contigo o cosas tontas pero vitales como: ¿dónde has estado, tienes frío?. Nadie contestó, como lo supuse y seguí mi camino sin lamentarme. Luego pensé en el destino, o al menos en el destino inmediato. Terminé esa noche en el casino haciendo apuestas fuertes (el hecho de que sean fuertes no radica en la cantidad, sino en lo atrevido de la apuesta) a favor de los caballos menos favoritos y las perdí todas. Ni siquiera estuve cerca de ganar una carrera. Pese a todo salí jodido y radiante, pensando, una vez más, que el mundo es redondo y se mueve.
Posdata: mañana se va Ana para Argentina. Te deseo. Buen viaje. Mi semana quedó en una ingrata caja registradora, no podré darte ningún regalo.
¿Alguien tiene algún remedio para alejar los sueños extraños? sueño que en lugar de hijos tendré pavoreales.

13 comentarios:

Carmen Sa dijo...

una compañera tuya con el episteme desordenado, manda decir que esto que relatas de tu puente no es algo que ella viva sólo en los puentes, es una cosa de todos sus días... de vacaciones y no, de estancias o no (no es cierto)... jeje... vive siempre en ese límbico desmadre temporal, en una casi feliz confianza en no sé qué providencias que le echarán la mano...
claro, hasta qe la alcanzan las obligaciones y las angustias
jajaja
besos

Diversa Luberza dijo...

Con que Blas Arlt... interesante...

marthaaa dijo...

la plaza, la iglesia, la familia, el elotero, la basura, la cantina, el camión ...looootería ¡¡¡ jeje, no lo pude evitar ¡¡

mar adentro dijo...

Tus hijos serán lindos y cuando se sientan felices y orgullosos de su padre, lo sabrás, pues abrirán su plumífero y colorido abanico trasero.

Svetlana dijo...

yo padeci de mal de amores en el puente
o maldicion
espero la semana santa sea mejor conmigo

Aleita! dijo...

compra un espanta-sueños o algo así.

Unknown dijo...

Al menos no fue un puente dental, o debería haberlo sido? Tal vez el dolor te hubiera adormecido y oooh dios existe el dolac... chale otra vez recomendando pastillas para pasarla bien ouch!

Kitsune dijo...

Si de algo sirve yo sí pensé en Gustavo Cerati
:P

brenda ríos dijo...

pasando por aquí... a conocer el barrio.
pero finge que no me ves así uno practica a sus anchas eso del voyeaur que a todos nos provoca.
mis abrazos.

Cicuta drinker dijo...

siempre, lo digo en verdad,que me siento feliz, vengo a tu blog a enfrentarme con la terrible sensación de abandono que siempre leo. gracias por regresarme a mi condición de penélope.

Sabes que conmigo no dijo...

el remedio:
sexo

hola cochiwero
como estás

Anónimo dijo...

america del sur se siente tan sola sin tin que he reservado un vuelo. Sale para semana santa.

Buenos Aires es tan irresistible!

Blas Barajas, escritor dijo...

ay cabrón, gracias a todas por sus comentarios, pero debo poner especial atención al último.

Mata cerdos, de casualidad ese mal de andar comprando boletos no te lo pasó el silvano, o no eres tú el Silvano? digo porque son acciones propias de su campo semántico. Espero me pases los datos precisos del vuelo y todas esas cosas para ir alistando mis chivas. Ayer hablé con mi madre y le dije que me largaba a Buenos Aires porque una admiradora me había regalado un boleto, así es que espero no la decepciones porque ya me vi por aquellos rumbos. Además de la semana santa, creo que podré aprovechar unos días más ya que todo parece indicar que, como ya se nos va haciendo costumbre, habrá huelga de nuevo. Así que nos vemos por allá.

Manuel, no seas vicera. Si yo fuera tú, no volvería jamás a este lupanal del diablo.